miércoles, 29 de abril de 2009

Esperanza y los funcionarios

5 de Marzo de 2009: "Si todos los españoles fueran funcionarios habría colas, escasez, hambre, miseria y corrupción, como ha sucedido en los países del socialismo real. Mi obligación es destinar el menor dinero posible al empleo público y garantizar que la economía productiva, que es la que funciona en este país, pague los menos impuestos posibles para crear el mayor número de empleos."
20 de Abril de 2009: "Es una vergüenza que los funcionarios tengan una subida del 5%, cuando los precios bajan un 1% y cuando cada día van al paro 7000 españoles."

Son declaraciones de Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad autónoma de Madrid.

Como poco resulta sorprendente que una de las pocas conclusiones que ha expresado públicamente esta mujer en relación al momento de crisis económica que estamos viviendo, haga referencia a los funcionarios, trabajadores a quienes nadie les ha regalado nada; trabajadores que con dedicación y esfuerzo han conseguido superar una serie de pruebas para conseguir un puesto de trabajo legal y digno; trabajadores que en muchos casos están recibiendo un salario inferior a su nivel de cualificación o inferior al que recibirían si trabajasen en esa economía productiva tan adorada por nuestra presidenta, pero que han preferido compensarlo con una verdadera conciliación entre vida laboral y personal; trabajadores que, además de soportar la mala fama que ya arrastran entre la sociedad, deben aguantar que una de las representantes de la administración pública lleve a cabo un ataque directo y feroz contra ellos, trabajadores de esa misma administración pública; trabajadores que, según ella, no suponen un factor de calidad y estabilidad en el conjunto del empleo...
Resulta sorprendente que esa economía productiva, que tanto defiende con uñas y dientes esta mujer, no merezca ningún análisis crítico por su parte, aunque tan sólo sea con la intención de no cometer de nuevo los mismos errores...
Resulta sorprendente que esta mujer, que hace tan sólo un año presumía de presidir la comunidad autónoma con el mayor PIB de todo el territorio español, se lave las manos en momentos como éste y descargue toda la responsabilidad hacia el gobierno central...
Y resulta sorprendente que esta mujer, que está desmantelando (y no estoy haciendo demagogia) los servicios públicos de esta comunidad, sea reelegida, una y otra vez, con una mayoría absoluta abrumadora...

Como funcionaria que soy, no abandono la esperanza de librarnos algún día de esta siniestra Esperanza...

jueves, 16 de abril de 2009

Almodóvar

Después de ver la última película de Almodóvar, Los abrazos rotos, alguien me dijo, un día voy a hacer la prueba: voy a ver una película suya sin sonido; creo que me va a gustar tanto o más. Y estoy totalmente de acuerdo.
Con este comentario no pretendo infravalorar la parte narrativa de sus películas, la que hace referencia a los diálogos (en muchos casos magistrales) y a la trama, sino destacar, por encima de todo, el punto fuerte de este gran director, que es esa parte visual tan potente y personal de sus películas (los colores, los encuadres, el movimiento de cámara...), es decir, su facilidad para contar con imágenes parte de esa trama, imágenes que te atrapan desde el principio, sin importar casi lo que te están contando, como si por sí mismas fueran suficientes... Por ello considero que cada estreno de Almodóvar requiere una visita obligada al cine.
Algún día yo también haré la prueba: quitaré el sonido y disfrutaré aún más, si cabe, de esos colores y encuadres que tan sólo él sabe hacer.